Tempus fugit. Y todos lo sabemos. Vértigo... inseguridad... indecisión... afianzamiento... realidad... Y encima para atraparlo en su loca carrera hacia adelante empleamos falsos guardianes, los relojes, que ¿lo encadenan? o ¿nos encadenan? ¿Y si viéramos el tiempo de... otra forma? ¿El resultado para nuestra vida sería el mismo?... No os creáis nada. Un texto serio para una boutade hacia adelante.
"Tempus fugit"
Y si te gustó... o no, y me quieres dejar un mensaje... siempre es alentador saber que alguien está al otro lado.
Que lo disfrutes.
Como cualquier nacimiento, la ilusión se suma al deseo de continuidad en el tiempo. Si las musas tienen a bien rendirme visita, si soy capaz de organizar mi tiempo y si ahí en el lado en donde te hallas das importancia y dedicas unos segundos de tu tiempo a leer lo que te ofrezco ..., viajaremos juntos. La imaginación será el hilo conductor que de alas a mis propuestas, tu interés o quizás tu curiosidad, el abrazo con el que se acunarán los textos que te iré proponiendo.
Un amigo me dijo que eliminó los relojes de su vida y se dedicó a hacer lo que en el momento le place, que disfruta más y se preocupa menos
ResponderEliminarUn saludo
Sano y loable propósito que la mayoría alguna vez nos planteamos... pero que muy pocos logran hacer suyo sin perder un ápice de su identidad. Gracias por hacerte presente.
EliminarEstá bien el planteamiento, ahora mismo dejaba yo un comentario con esa frase.
ResponderEliminarEncantada de leerte.
Gracias Tracy. Tendremos más oportunidades mutuas de leernos.
EliminarYo siempre he detestado llevar reloj, ahora con el móvil, lo uso lo menos posible. Muy buena selección de todos los tipos de los que disponemos para "encadenarnos" saludos jueveros 😀
ResponderEliminarYa desde la mitología clásica el encadenamiento al tiempo ha sido una constante en nuestra existencia contra la que luchamos... habitualmente con poco éxito... ¡No desfallecer es tarea de titanes!
Eliminar¡Hola! Me has recordado al cuento de Cortazar 'Instrucciones para dar cuerda a un reloj'. Uso reloj, pero lo justo y necesario, creo que es importante no volver obseso con el tiempo.
ResponderEliminar¡Un abrazo!
Sin duda Roxana. Pero es tan difícil como la certeza de estar vivos...
EliminarEn verdad el reloj nos encadena, yo procuro ignorarlo, aunque lo lleve conmigo en mi muñeca.
ResponderEliminarBesos.
Llevarlo en la muñeca... ¡gran acierto de quien así lo inventó!, a pesar de la paradoja que supone sentirse atado desde la creencia de que somo libres dentro de él.
EliminarActualmente los físicos cuánticos están en plenos debate sobre lo que se denomina la flecha del tiempo, es decir, si el tiempo como entidad física puede ser reversible.
ResponderEliminarEntre Cupido y sus flechas... y la Relatividad de Einstein... ¡difícil elección! La primera nos hace creer lo que queremos ser. La segunda nos ofrece la certeza de imposibles aún por descubrir. ¡Complicado!
EliminarUna vrz oí que la vida es como un reloj de arena que tiene la parte de arriba en negro y no puedes saber cuanta arena queda. Así que supongo que lo importante es que haces con el tiempo que tienes.
ResponderEliminarUn saludo.
Cierto Pikxi. El futuro aún no siendo nuestro, es lo único que nos queda para sentirnos protagonistas. Otra cosa es el resultado. Lo que es cierto es que "moriremos en el intento".
EliminarYo desde que me jubile me quite el reloj, es cierto que he vivido muuuchisimos años encadenada a el
ResponderEliminar¿Encadenado al reloj o al tiempo...?
EliminarSiempre me costo dormir con el tic tac, el relog electronico no era mucho mejor. Odio los relojes sobre todo en las noches de espera, como tu dices es preferible seguir un ritmo biologico impuesto solo por lo que nos pide nuestro cuerpo o nuestra intuición. Tu relato donde se mezclan varias historias me ha encantado. Besos.
ResponderEliminarCierto Inma. Lo biológico, lo que sale de dentro... puede ser una linda metáfora en la que sumergirnos y avanzar hacia donde queramos.
EliminarLos relojes nos encadenan, pero ¿Qué pasaría si cada uno de nosotros decidiera prescindir de ellos? todo sería un caos. Poder prescindir del reloj es solo un lujo al alcance de muy pocos.
ResponderEliminarMuchas gracias por participar ha sido un placer leerte!
Gracias Charo. El reloj es un simple artilugio, el tiempo una realidad. El problema es nuestro compromiso con la acotación precisa del tiempo al servicio de intereses: nuestros o de los otros...
EliminarMuy bien planteado el relato y como ya habeís comentado, vivir sin controlar el tiempo y el reloj es algo dificil o casi imposible.
ResponderEliminarBesos
Gracias San. Perdón por responderte tan tarde, llevo un tiempo sin venir al escritorio.
Eliminar